El iluminador ha pasado a ser uno de los productos de maquillaje estrella tanto para maquilladores profesionales como para mujeres a las que les gusta mejorar su imagen en casa y verse más atractivas. Ahora, lo que se lleva es un look sin excesos y un maquillaje "efecto cara lavada" que realza la belleza natural del rostro. Y para conseguir esta tendencia, el iluminador es clave, pues le proporciona a la piel la luz que necesita para lucir radiante sin gruesas capas de base de maquillaje u otros productos. Además de los que puedes adquirir en las tiendas, también puedes hacer un iluminador casero siguiendo unos sencillos pasos. Permanece atenta y descubre el paso a paso completo en este artículo de unComo.
Receta 1 de iluminador casero
El iluminador es un cosmético que se complementa a la perfección con la base de maquillaje, pues se aplica justo después de esta para lucir una piel con un aspecto mucho más luminoso y radiante. Hay diferentes recetas disponibles para elaborar tu propio iluminador en casa, y la primera que te mostramos la puedes hacer únicamente con una base de maquillaje y unas sombras de ojos que tengas en tu neceser habitual; presta atención a las siguientes indicaciones para saber cómo deben ser los productos y cuáles son los pasos a seguir.
Ingredientes y materiales:
- Base de maquillaje en beige claro: en el caso de que tu base de maquillaje sea bastante oscura, es importante que elijas una que sea unos 2 tonos más claros.
- Sombra de ojos plateada o blanca.
- Palito de naranja o espátula pequeña.
- Tarro con tapa.
Preparación:
- En el tarro que vas a utilizar para guardar el iluminador, agrega una pequeña cantidad de base de maquillaje. Puede ser suficiente con 1 o 2 cucharadas pequeñas, pero puedes añadir más en función de la cantidad de iluminador que quieras obtener.
- Con un palito de naranjo, rasca la sombra de ojos que vas a utilizar para darle el toque de luz al iluminador hasta convertirla en polvo fino y añade un poco en el tarro junto a la base. Toma en cuenta que si eliges una sombra plateada, el iluminador final será más intenso que si eliges una en color blanco.
- Remueve los dos ingredientes con la ayuda del palito de naranjo o con la espátula.
- Comprueba el tono del iluminador obtenido y añade un poco más de sombras o de base si lo consideras necesario.
- Cuando esté listo, extiende una pequeña cantidad del producto en el dorso de la mano para ver el tono y el resultado final.
Receta 2 de iluminador casero
A diferencia de la receta anterior, la siguiente se prepara con una crema hidratante facial, por lo que el iluminador tendrá un efecto nutritivo estupendo para la piel del rostro. Para no correr riesgos innecesarios, los mejor es que utilices tu crema hidratante habitual, pues esta ya se adapta perfectamente a las necesidades de tu piel y te proporcionará un acabado perfecto. El proceso de preparación de este iluminador casero es muy similar al anterior, toma nota y ¡manos a la obra!
Ingredientes y materiales:
- Crema hidratante facial
- Sombra de ojos clara o con un poco de brillo: pueden servirte las beiges, blancas o plateadas.
- Palito de naranjo o espátula pequeña
- Tarro con tapa
Preparación:
- Coloca un poco de crema hidratante facial en el tarro.
- Agrega la sombra de ojos elegida convertida en polvo fino. Para ello, tan solo tienes que rallar sobre la superficie de la sombra con la ayuda de un palito de naranjo.
- Remueve los dos ingredientes hasta que se integren por completo y obtengas el iluminador.
- Comprueba el tono del iluminador aplicando una pequeña cantidad del mismo en el dorso de tu mano y modifica las cantidades si es necesario.
Cómo aplicar el iluminador
Ahora ya tienes listo tu propio iluminador y podrás usarlo siempre que quieras darle más frescura y luz a tu piel. Nuestro consejos es que te lo apliques cuando notes que tu rostro se ve cansado y con signos de fatiga, si no has podido dormir las horas suficientes o necesitas aportarle a la piel un poco de luminosidad para que no se vea tan opaca.
Como hemos comentado anteriormente, es un cosmético que se debe aplicar después de unificar el tono de la piel con la base de maquillaje. Y, además, es clave aplicarlo en unos puntos estratégicos para que esos toques de luz que proporciona se noten y la piel se vea súper radiante. De esta forma, tendrás que colocarlo en:
- Zona de los ojos: parte exterior del lagrimal (entre el lagrimal y el tabique nasal), debajo y encima del arco de la ceja y debajo de las pestañas inferiores en caso de querer disimular las ojeras o las bolsas de los ojos.
- Demás zonas del rostro: parte alta del pómulo, aletas de la nariz, encima del tabique nasal, centro de la frente y centro de la barbilla.
Coloca una pequeña cantidad de iluminador en esas zonas y difumínalo con una brocha o pincel dando toquecitos hasta que veas que se funde con la base de maquillaje que has aplicado anteriormente. Para un efecto mucho más duradero, luego aplica una ligera capa de polvos traslúcidos por todo el rostro.
Si deseas descubrir más detalles, consulta el artículo Cómo aplicar un iluminador.