La Maizena, o fécula de maíz, es una finísima harina con múltiples aplicaciones culinarias que, además, cuenta con muchísimos beneficios cuando se usa como ingrediente en tratamientos de cuidado capilar. ¿Sabías que elaborando una sencilla mascarilla de maicena puedes conseguir una melena más brillante, hidratada e incluso lisa?
Si quieres aprender a hidratar y cuidar tu melena de forma natural y eficaz, no te pierdas el siguiente artículo de unCOMO, pues te explicamos cómo hacer una mascarilla de Maizena para el cabello paso a paso y cómo aprovecharte de todas las propiedades de este producto. ¡Toma nota!
Beneficios de la maicena para el cabello
Si te preguntas para qué sirve la Maizena en el cabello (o cualquier otra maicena), antes debes tener en cuenta que esta puede utilizarse mezclada con agua o bien con otros ingredientes para potenciar su efecto, dependiendo siempre del motivo por el cual uses este remedio. ¿Quieres saber cómo actúa y para qué sirve la Maizena en el cabello exactamente? Toma nota, pues te hablamos de cómo beneficiarte de la fibra, los minerales (como el hierro, el fósforo, zinc, calcio, magnesio...) y los antioxidantes (vitamina A, vitaminas del grupo B, C y E) de esta fina harina.
Hidrata desde el interior
Hay que tener claro que la maicena, por sí sola, no hidrata el cabello. No obstante, su textura harinosa es ideal para que, combinada con algunos productos líquidos, esta cree una pasta ligera y fácil de aplicar capaz de sellar las cutículas del cabello, logrando así proteger la fibra capilar de agresiones externas y contribuyendo a mantener su hidratación natural. En este caso, una de las mejores opciones es mezclar la Maizena con aceite de oliva virgen, aceite de coco o aceite de argán, ya que todos ellos incluyen en su composición vitaminas, minerales y antioxidantes esenciales para el cabello.
Alisa el cabello
¿Funciona la Maizena para alisar el cabello? Si es así, ¿cómo se prepara la Maizena para alisar el cabello? Lo primero que debes saber es que la maicena no tiene propiedades mágicas para alaciar el pelo, especialmente si se trata de cabellos muy rizados. Sin embargo, debido a la combinación de nutrientes y elementos mencionados anteriormente, la Maizena sí nos ofrece propiedades fantásticas para controlar el encrespamiento y aportar suavidad a nuestra melena, algo imprescindible para alisarla con más facilidad.
La maicena ayuda a controlar los cabellos más rebeldes para que estos se peinen con mucha más facilidad y necesiten menos calor para estar completamente lisos. Así pues, si te preguntas cómo alaciar el cabello con maizena, debes saber que mezclada con productos naturales anti-encrespamiento puede ayudarte a lucir un pelo mucho más liso. Más adelante te enseñaremos cómo alisar el cabello con Maizena y aceite de coco para que puedas elaborar esta mascarilla cómodamente desde casa, no obstante, te recomendamos también visitar este artículo sobre Cómo alisar el pelo con maizena.
Pelo más suave y sedoso
Como ya hemos visto, la maicena es ideal para controlar los cabellos más rebeldes, pero, ¿cómo ayuda esta a que tu pelo esté más suave y sedoso? La Maizena ayuda a reparar las fibras secas y las puntas abiertas de tu melena, pues el almidón no solo logra mantener la hidratación natural del cabello, sino que también ayuda a absorber y mantener bajo control el exceso de grasa en el cuero cabelludo, consiguiendo así un pelo más sano.
Combate el frizz
¿Funciona la Maizena para el pelo con frizz? ¿Es realmente un remedio eficaz? Ya hemos visto que la maicena tiene componentes ideales para acabar con la sequedad en el cuero cabelludo, un problema que a menudo hace que tu melena luzca descontrolada y dañada. Como consecuencia, utilizar mascarillas para el cabello con maicena es una solución sencilla y eficaz para contribuir a un pelo más lacio y libre de frizz.
Para potenciar este beneficio, desde unCOMO te aconsejamos mezclar la maicena con productos anti-frizz como el aceite de coco o el aceite de macadamia. Además, te recomendamos echar un vistazo a este artículo sobre Cómo evitar el frizz en el cabello, donde encontrarás consejos muy útiles y errores a evitar.
Cómo elaborar una mascarilla de Maizena para el pelo
Reparar en profundidad las fibras capilares y mantener el encrespamiento bajo control es fácil con una mascarilla de Maizena básica a la que siempre puedes añadir algún ingrediente extra que te ayude a lograr tus objetivos. Como elementos esenciales necesitarás 3 cucharadas de Maizena y un vaso y medio de agua:
- Vierte en un cazo el agua e incorpora la maicena poco a poco, mientras remueves con un tenedor para que esta comience a disolverse bien.
- Seguidamente, pon el cazo a fuego muy bajo y continúa removiendo.
- Mezcla durante unos minutos hasta que la mezcla adquiera una textura similar a la de un gel.
- Retira del fuego y remueve bien una última vez. Espera a que se enfríe del todo antes de aplicarla en tu cabello.
Ahora bien, si además de hidratar y nutrir tu melena te preguntas cómo alisar el cabello con maizena y aceite de coco, solo tendrás que incorporar este ingrediente a la mezcla que te acabamos de mostrar. Calienta en el microondas mismo 2-3 cucharadas de aceite de coco y, justo cuando retires el cazo de maicena y agua del fuego, añade el aceite y remueve para que se integre perfectamente.
Para acabar de realizar un preparado perfecto, te aconsejamos añadir 3 cucharadas de miel a la mezcla de maicena, agua y aceite de coco, ya que este producto es uno de los mejores aliados naturales para el pelo. En este otro artículo te hablamos de otras Mascarillas de miel para el pelo que podrían interesarte.
Cómo aplicar la mascarilla de Maizena en el cabello
Una de las ventajas de la mascarilla de Maizena es que resulta apta para todo tipo de cabellos, ya sean estos lisos, ondulados, rizados o incluso afro. Salvo que sufras algún problema capilar (como, por ejemplo, dermatitis en el cuero cabelludo, afección que deberás consultar con tu dermatólogo), te aconsejamos aplicarte esta mascarilla cada quince días aproximadamente. Si buscas un tratamiento de maizena para el pelo maltratado omuy seco, puedes servirte de este remedio una vez a la semana.
- Tras elaborarla, comprueba que tu mascarilla de maicena esté completamente fría (a temperatura ambiente).
- Lava tu cabello como haces normalmente y retira el exceso de agua secándolo superficialmente con una toalla. No te frotes el cabello al secarlo, pues podrías debilitarlo y hacer que se quebrase con mucha más facilidad. Utiliza, a poder ser, una toalla de microfibra y seca con mucho cuidado.
- Lo ideal es aplicar la mascarilla en el cabello limpio y húmedo, pero antes te aconsejamos peinarte y separar el cabello en algunos mechones para facilitar la aplicación de la mascarilla.
- Con ayuda de un pincel para teñir (o con tus propios dedos si te resulta más fácil), ve repartiendo la mezcla de maicena por todo el cabello, empezando por las raíces y dirigiéndote hacia las puntas.
- Incide en las áreas de tu melena más castigadas, generalmente medios y puntas. Comprueba que has repartido la mascarilla de manera homogénea por todo tu cabello.
- Para obtener la efectividad deseada, deberás mantenerla en tu pelo al menos 30-40 minutos y, a poder ser, cubrir tu cabello con un gorro de ducha durante este tiempo.
- Transcurrido el tiempo indicado, retira la mayor parte de la mascarilla con la ayuda de un peine y, a continuación, aclara con abundante agua templada hasta asegurarte de que no queden restos de mascarilla.
- Seca con cuidado una vez más y, a poder ser, prescinde del secador.
Ya tendrás tu mascarilla con maizena para el cabello, un remedio natural efectivo y fácil de realizar para lucir un pelo más hidratado, nutrido y liso.
¿Se puede guardar la mascarilla de Maizena?
Desde unCOMO te aconsejamos evitar siempre guardar mascarillas caseras. Ten en cuenta que los remedios naturales que elaboramos en casa no solo cuentan con ingredientes que pueden perder sus propiedades con el paso de los días, sino que la falta de conservantes puede hacer de ellos un peligro para nuestro cabello o nuestra piel.
Los ingredientes antioxidantes, por ejemplo, pueden acabar siendo pro-oxidantes sin una buena conservación, lo que podría acabar perjudicándonos. Por ello, te recomendamos respetar siempre las medidas que te ofrecen los diferentes remedios y no hacer grandes cantidades de mascarilla para conservar. No te arriesgues y haz siempre la cantidad justa que vayas a utilizar.